A todos nos encanta presumir de las plantas y el verde que tenemos en cada rincón de nuestro hogar. Las plantas le dan un toque de calidez a los espacios de nuestra casa, conectándonos un poco con el afuera y con la naturaleza.
Para lograr plantas vigorosas y en su máximo esplendor, deberás aprender ciertos trucos que al aplicarlos cambiarán de forma rápida el aspecto de tus plantas. Lo bueno es que la mayoría de éstas aplicaciones suelen ser con ingredientes que fácilmente encontramos en nuestra casa.
En este caso nos toca hablar del muy conocido arroz, un ingrediente que probablemente nunca falte en tu cocina. Así como lo lees, no solo nos alimenta sino que alimenta nuestras plantitas para que se vean con ese verde hermoso que nos encanta contemplar cada mañana al desayunar.
Tres formas de utilizar arroz en las plantas
En el video se puede ver como un profesional lo explica paso a paso pero también hemos hecho nuestras propias aclaraciones con información relevante para que puedas aplicar el arroz en tus plantas correctamente.
1- Abono en maceta
Este método es un abono de liberación lenta, esto quiere decir que se irá desprendiendo el almidón del arroz poco a poco. Al regar las plantas el grano de arroz comenzará a hincharse e irá lavando su almidón para dejarlo en el suelo de nuestra maceta. Con cada riego, la tierra de nuestra planta se llenará de nutrientes debido al arroz que incorporamos.
FORMA DE APLICACIÓN: Necesitamos arroz y una cuchara sopera. La dosis es una cucharada de arroz por cada maceta de tamaño grande, en caso de ser más pequeña solo usarás media cucharada de arroz. Repartimos nuestro arroz alrededor del tallo de la planta, dejando un círculo alrededor. Puedes ayudarte con la cuchara para mezclar el arroz con la tierra de la parte superior de nuestra planta, de ésta forma se absorberá de forma más lenta y nos dará tiempo a que éste elimine el almidón.
2- Abono de fondo
Esta forma de aplicación también es un abono de liberación lenta. Deberás aplicarlo una vez cada dos meses cualquiera de las dos formas, debido al tipo de liberación que tienen. No temas que se llene el sustrato de plantas de arroz, el arroz que consumimos sufre un proceso de refinado y por lo tanto es imposible que germine.
FORMA DE APLICACIÓN: En una maceta de tamaño grande coloca en el fondo un poco de tierra fértil junto con dos cucharadas soperas de arroz. Mezcla los dos ingredientes para que quede una mezcla homogénea en el fondo, notarás que los granos de arroz parecen que fueran perlita. Luego apoyas la planta que vas a trasplantar y cubres el resto con tierra. En éste caso además de abono, el arroz actuará como el ingrediente que facilitará el drenaje de nuestra planta.
3- Agua de arroz
A diferencia de las formas de uso anteriores, el agua de arroz actuará como un abono de liberación rápida. Este método es recomendable para las plantas que necesiten recuperar nutrientes de forma rápida. Debes aplicarlo una vez a la semana por dos semanas y podrás notar una gran diferencia en la fortaleza de tu planta.
FORMA DE APLICACIÓN: Echar media taza de arroz blanco en una botella de litro y medio de plástico, rellenar con agua de la canilla hasta llenar la botella. Tapar y mover para que se desprenda el almidón, luego dejar reposar por media hora. Una vez transcurrido ese tiempo quedará como un líquido blanquecino, éste es un fertilizante excelente para tus plantas. Aplica como riego, aprovechando el arroz del fondo para que se mezcle con la tierra y conserve la humedad de la misma.
Beneficios del arroz en las plantas
- Este ingrediente favorece la fotosíntesis que realizan nuestras plantas.
- El almidón que desprende, le aporta un extra de energía que repercutirá en el desarrollo de nuestra plantita de la mejor manera.
- Además es rico en proteínas, fibra, aminoácidos, calcio, fósforo, hierro, zinc y potasio, y una gran cantidad de vitaminas.
¡Que buen descubrimiento para nuestro edén personal!
Fuente: elmundopositivo