Dar sin esperar es un bello hábito que todos podemos desarrollar. Esto no sólo nos permite aprender a desapegarnos y compartir, también ayuda a edificar un presente más humano. Y en esa dar sin esperar, nunca se sabe… quizá puede que algún día la vida nos sorprenda, porque todo lo que hacemos vuelve : )
Cuanta razón tiene este post, es muy importante dar a los demás